Segundo Comunicado de Nuestro Obispo Roberto López Rojas.
He realizado intensos esfuerzos por comunicarme con nuestros Jefes de Sector y pastores para conocer, con la mayor especificidad posible, la situación de cada congregación. Lamentablemente los medios de comunicación telefónica resultan muy inestables. Pese a ello, al escuchar personalmente a los valientes y fieles siervos de Dios con quienes he logrado establecer contacto, puedo señalar que ninguno de ellos ha sufrido con gravedad extrema el rigor de este sismo, sino que el Señor ha extendido su misericordia con gran benevolencia. Sin embargo, diversas pérdidas materiales, algo de daño físico y un extenuante trabajo han caracterizado los informes de muchas de las iglesias que hemos logrado contactar o visitar.La incertidumbre por ignorar el estado de cada una de nuestras iglesias es realmente abrumadora. Sin embargo, nuestras fervientes oraciones, el apoyo de pastores y colaboradores, unido a la fuerte presencia del Espíritu Santo nos hace creer con firmeza que “…las aflicciones del tiempo presente no se comparan con la Gloria Venidera que en nosotros ha de manifestarse…” Por ello les invito nuevamente a unirnos en nuestra Cadena de Oración de 40 Días por nuestras Conferencias e incluir en nuestras peticiones al Señor, una sentida oración por nuestro país. Puesto que en medio de esta catástrofe tal vez no nos reúna una línea telefónica, un e-mail o un fraternal abrazo, pero al orar juntos, el Señor nos une en el Espíritu Santo con un vínculo indestructible.
Ante las comprensibles consultas de nuestros amados pastores respecto de la Celebración de nuestras Conferencias, me permito señalarles que para este martes 02 de Marzo del año en curso tendré una respuesta definitiva. Para ello estamos elaborando un completo catastro de la situación de todos nuestros pastores y sus congregaciones. Con esta información decidiremos qué es lo más conveniente: Postergarlas para una fecha posterior; Realizarlas en forma abreviada o Realizarlas como estaba propuesto u otra decisión que el Señor ponga en nuestro corazón. Sea cual fuere la decisión a la que nos lleve el Espíritu del Señor, de todos modos nos resulta imperativo reunirnos para organizar un plan de apoyo y asistencia a las comunidades más azotadas por el terremoto.
Sin embargo, por ahora lo más importante es orar al Señor, comportarse como fieles soldados de Cristo, llevando una palabra de esperanza a los que sufren y esperar con paciencia en el Señor de toda consolación. Sepan mis amados consiervos que estaremos trabajando incansablemente para hacer todo lo que esté a nuestro alcance por hacerles sentir acompañados y cubiertos espiritualmente. Me sentiré profundamente agradecido con todos aquellos pastores, hermanos y amigos que tengan acceso a Internet y que con generosidad puedan compartir estos comunicados con nuestros pastores y iglesias.
Reciban, de quien les preside en el Señor un afectuoso saludo en Cristo.
Vuestro Servidor,
He realizado intensos esfuerzos por comunicarme con nuestros Jefes de Sector y pastores para conocer, con la mayor especificidad posible, la situación de cada congregación. Lamentablemente los medios de comunicación telefónica resultan muy inestables. Pese a ello, al escuchar personalmente a los valientes y fieles siervos de Dios con quienes he logrado establecer contacto, puedo señalar que ninguno de ellos ha sufrido con gravedad extrema el rigor de este sismo, sino que el Señor ha extendido su misericordia con gran benevolencia. Sin embargo, diversas pérdidas materiales, algo de daño físico y un extenuante trabajo han caracterizado los informes de muchas de las iglesias que hemos logrado contactar o visitar.La incertidumbre por ignorar el estado de cada una de nuestras iglesias es realmente abrumadora. Sin embargo, nuestras fervientes oraciones, el apoyo de pastores y colaboradores, unido a la fuerte presencia del Espíritu Santo nos hace creer con firmeza que “…las aflicciones del tiempo presente no se comparan con la Gloria Venidera que en nosotros ha de manifestarse…” Por ello les invito nuevamente a unirnos en nuestra Cadena de Oración de 40 Días por nuestras Conferencias e incluir en nuestras peticiones al Señor, una sentida oración por nuestro país. Puesto que en medio de esta catástrofe tal vez no nos reúna una línea telefónica, un e-mail o un fraternal abrazo, pero al orar juntos, el Señor nos une en el Espíritu Santo con un vínculo indestructible.
Ante las comprensibles consultas de nuestros amados pastores respecto de la Celebración de nuestras Conferencias, me permito señalarles que para este martes 02 de Marzo del año en curso tendré una respuesta definitiva. Para ello estamos elaborando un completo catastro de la situación de todos nuestros pastores y sus congregaciones. Con esta información decidiremos qué es lo más conveniente: Postergarlas para una fecha posterior; Realizarlas en forma abreviada o Realizarlas como estaba propuesto u otra decisión que el Señor ponga en nuestro corazón. Sea cual fuere la decisión a la que nos lleve el Espíritu del Señor, de todos modos nos resulta imperativo reunirnos para organizar un plan de apoyo y asistencia a las comunidades más azotadas por el terremoto.
Sin embargo, por ahora lo más importante es orar al Señor, comportarse como fieles soldados de Cristo, llevando una palabra de esperanza a los que sufren y esperar con paciencia en el Señor de toda consolación. Sepan mis amados consiervos que estaremos trabajando incansablemente para hacer todo lo que esté a nuestro alcance por hacerles sentir acompañados y cubiertos espiritualmente. Me sentiré profundamente agradecido con todos aquellos pastores, hermanos y amigos que tengan acceso a Internet y que con generosidad puedan compartir estos comunicados con nuestros pastores y iglesias.
Reciban, de quien les preside en el Señor un afectuoso saludo en Cristo.
Vuestro Servidor,
Rev. Roberto López Rojas
Obispo Presidente
Como Iglesia Melipilla Centro vuestro Pastor Gobernante se adhiere al llamado de nuestro Obispo, invitando a la congregación a reunirnos en familia todos los días a las 22:30 horas para en comunión clamar delante de la presencia del Señor. Recordamos a nuestros hermanos nuestro servicio especial de oración todos los días jueves a las 19:30 horas.